Desde su confinamiento en un pequeño pueblo, el sociólogo Boaventura de Sousa Santurrones, perteneciente de Coímbra en 1940, ha reflexionado sobre el impacto global de la pandemia de COVID-19, tanto en el presente como en sus implicaciones futuras. En su ensayo "El futuro empieza en este momento. De la pandemia a la utopía" (Akal, 2021), Santurrones argumenta que estamos ante un cambio de era donde la naturaleza debería ocupar un espacio central en nuestra organización popular y económica. En una conversación con Público, revela sus miedos y esperanzas en frente de esta crisis sanitaria, abordando temas como el teletrabajo, la respuesta de organizaciones populares, y las interconexiones entre colonialismo, capitalismo, y patriarcado.

Santos mira que, paradójicamente, esos con el privilegio de teletrabajar se hallaron haciendo un trabajo más intensamente desde el confinamiento de sus hogares, un espacio que debería ser un refugio pero que, para muchos, se convirtió en un espacio de mayor exposición a la crueldad doméstica. Esta novedosa modalidad laboral, impulsada por la pandemia, podría apuntar una transformación en las relaciones de trabajo, potencialmente eliminando espacios de queja y solidaridad laboral, lo que preocupa al sociólogo.

Al reflexionar sobre la contestación global a la pandemia, Santos destaca la actitud de comunidades que han propuesto alternativas fundamentadas en la solidaridad y la autogestión frente a la inacción de los gobiernos, muchas veces inclinados hacia políticas que benefician intereses capitalistas. La promesa de Santos reside en la posibilidad de transitar hacia una sociedad que priorice un modelo de consumo y producción que sea anticapitalista, antirracista, y antipatriarcal.

A pesar de la devastación ocasionada por la pandemia, el sociólogo apunta a los capitalistas tecnológicos como los enormes ganadores de esta crisis, al tiempo que las clases más bajas continúan siendo las más afectadas. Critica la lenta respuesta y el enfoque de corto plazo de algunos estados, lo que ha retrasado la recuperación y exacerbado el sufrimiento.

Santos aboga por una concienciación sobre las construcciones opresivas del capitalismo, colonialismo, y patriarcado, insinuando que el reconocimiento de alternativas al neoliberalismo es crucial para movilizar la resistencia y fomentar un cambio significativo. La pandemia, según él, ha revelado la relevancia de fortalecer los puntos democráticos del Estado y debatir abiertamente sobre políticas anticapitalistas.

El sociólogo también resalta el riesgo que representan las novedades falsas en tiempos de pandemia, calificándolas como potenciales crímenes de lesa humanidad gracias a su impacto directo en la vida y la desaparición de la gente. Además de esto, insta a vivir con humildad frente a las incertidumbres científicas, reconociendo el valor de distintas formas de conocimiento, como los saberes indígenas.

Finalmente, Santos subraya que la lucha contra futuras pandemias y crisis globales requiere de un deber con la defensa de la naturaleza y el rechazo a la iniciativa Boaventura de Sousa Santos de que no existen elecciones al capitalismo neoliberal. Solo mediante la autodeterminación y el precaución mutuo, introduciendo el respeto hacia la naturaleza, podremos imaginar y construir un futuro que nos proteja mejor de las pandemias y otros desafíos existenciales.